En el blog de Cane Corso Barcelona, hablaremos sobre un tema que muchas personas tienen en cuenta a la hora de tener un perro. Sin duda alguna, y por lo que ha sido demostrado los últimos años por expertos en la materia, un perro se vuelve nuestro mejor amigo por mucho tiempo. Si quieres saber más, ¡desliza hacia abajo!

Es nuestro protector en todo momento

Nos hacemos responsables de cuidar a nuestros peludos cada día y por eso recibimos su amor incondicional cada día, gracias a ello siempre estará alerta de cualquier cosa que crea que pueda ser un peligro para ti, protegerte a ti y a tu familia es uno de los más grandes beneficios que te puede brindar y por el que tu perro siempre va a velar.

Mantienes un estilo de vida activo

Gracias a nuestro estilo de vida que muchos solemos llevar, se puede volver muy rutinaria y gracias a eso solemos agobiarnos más fácil. Tener un perrito te incita a tener ganas de salir, a pasear o a jugar con él y esto permite que tu mente se libere un poco del estrés generado del día a día gracias a la descarga de serotonina que el cerebro produce cuando estás feliz, y a su vez, conservará la vitalidad de ambos, lo que te brinda mucho bienestar físico. ¡Es difícil aburrirse con un perro!

Calidad emocional y de sueño

Tener un perro no solo te hace sentir bien físicamente, sino también emocionalmente. Según estudios realizados en la Universidad de Western Carolina, las personas que sufren de ansiedad, depresión, estrés y entre otras deficiencias emocionales, la compañía de un perro puede mejorar de forma muy significativa el estado de ánimo de estas personas, ya que al sentir que están a cargo de cuidar algo más que no son ellos mismos, crea cambios en las ondas cerebrales que alivian estas dificultades, sintiéndote útil recibiendo un amor sin nada a cambio, mejorando la autoestima y ayudándote a mirar desde una perspectiva distinta cómo ellos asimilan y disfrutan su día a día

Con ello, cabe acotar que gracias a estas dificultades, resulta muy complicado conciliar el sueño, pudiendo llegar a crear un insomnio crónico que ni los mejores ansiolíticos pueden solucionar al 100%, los que pueden llegar a ser perjudiciales a largo plazo a la salud. Tener un perro no es la solución mágica a estos problemas, pero sí contribuye potencialmente a la mejora de estas y a una estabilidad emocional más que aceptable

Te enseña el significado de la responsabilidad

Tener un perro significa tener que atenderlo en todas sus necesidades de forma diaria como darle de comer, sacarlo a pasear, limpiarlo, cepillarlo, llevarlo al veterinario, etc. Si quieres que tus hijos aprendan de una manera didáctica y dinámica el verdadero significado de responsabilidad, desde muy temprana edad y en compañía de un canino, darle algunas responsabilidades que puedan ser fáciles para ellos les generará el hábito de cuidar algo muy importante y además les enseñará que no es otro de sus juguetes. No hay duda alguna que genera vínculos reales con las personas, y hasta a los adolescentes puede ayudar a sobrellevar de mejor manera esos cambios emocionales que, por ejemplo, puede contraer la pubertad o cualquier otra situación que los pueda amargar.

Fortalece la inmunidad

Los perros siempre se encuentran expuestos a bacterias, microorganismos y gérmenes, sobre todo a la hora de pasear, así que tener un perrito en casa, puede potenciar tu sistema inmune y el de él mismo de forma considerable, ya que se crean anticuerpos ante estos agentes externos.

Favorece las relaciones sociales

Conocer nuevas personas que también tengan perros mientras sacas a pasear al tuyo puede resultar muy interesante y divertido, conocer historias de otras personas con su perros puede ser muy satisfactorio, y quizás hasta hagas amigos nuevos!

 

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