Un cachorro de Cane Corso es un tesoro, una combinación perfecta entre ternura y potencia. El Mastín Italiano evoluciona desde su tierna apariencia peluda, cuando es un cachorro, hasta convertirse en un elegante y poderoso perro en la fase adulta.

Cuando reciben amor y cuidado en su etapa de cachorros, siempre serán los mejores compañeros y guardianes para sus propietarios.

El adorable Cachorro de Cane Corso

Cuando llega un cachorro a nuestra hogar es un momento maravilloso y emocionante en el que estamos acogiendo a un nuevo miembro a nuestra familia.

Si además es un cachorro de Cane Corso, vamos a disfrutar muchísimo de ese tierno pequeño que, en poco tiempo, se convertirá en un majestuoso guardián y leal compañero.

Su tierna mirada

Los cachorros de Mastín Italiano nacen con los ojitos cerrados y las pequeñas orejas plegadas y son un muy tiernos en cada uno de sus movimientos.

En torno a las tres o cuatro semanas los cachorros ya empiezan a abrir los ojos y, con su brillante y curiosa mirada, comienzan a explorar su entorno.

Es una etapa muy tierna y muy breve en la que el cachorrito se mueve con movimientos torpes y mirada inocente.

Pequeñas proporciones que desvelan un futuro majestuoso

Los cachorros de Cane Corso nacen bastante pequeños, en comparación con otras razas, si pensamos en sus futuras dimensiones.

A pesar de su pequeño tamaño, hay ciertos rasgos que nos harán adivinar cómo va a ser el cachorro de mastín italiano cuando sea adulto. La anchura del hueso de sus patitas, ya empieza a indicarnos cuál será su tamaño. En cuanto a su pequeña cabeza, la forma de su mandíbula y esos ojos ovalados, serán los rasgos que le harán ser un perro con mirada decidida y potente mandíbula.

El pelaje de un cachorro de Mastín Italiano

Los cachorros de Cane Corso tiene un pelo suave y corto, que le da un aspecto muy tierno y delicado.

Cuando el cachorro va creciendo, su pelo puede cambiar el tono e incluso el color.

Nacen con un tono más claro, que a medida que crecen, se va intensificando y mostrando la preciosa variedad de colores que tiene esta raza, que va desde el gris, negro, atigrado y marrón claro (formentino).

Mucha curiosidad y facilidad de aprendizaje

Los cachorros de Mastín Italiano son muy curiosos y tienen mucha facilidad y ganas de aprender.

Desde muy pequeños, les fascina explorar su entorno y les llama la atención los sonidos, olores y nuevas texturas. Es una frase muy importante para su socialización y para su futuro equilibrio.

En esta etapa es muy necesario que los cachorros se relacionen con otros perros y personas para ayudarles a consolidar su personalidad y comportamiento cuando sean adultos.

Crecimiento muy rápido

El crecimiento del Cane Corso es muy rápido y es fundamental alimentarles de forma adecuada y controlar su desarrollo a fin de que el perro disfrute de una buena salud.

También son importantes el ejercicio, moderado y progresivo, hasta que alcance la edad adulta. Esto beneficiará a su desarrollo muscular.

 

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