Hola, bienvenidos a mi conferencia. Mi nombre es Juan Manuel Morato y soy criador de Cane Corso en el criadero Itacoa. Hoy quiero compartir con ustedes la historia de uno de los ejemplares más especiales de nuestro criadero: X-Man Cane Corso. Este perro no solo se destacó por su imponente físico y temperamento, sino que también se convirtió en un símbolo de lo que representa el Cane Corso para aquellos que amamos y respetamos esta raza.
El Comienzo del Sueño: Un Amor por la Raza
Llevamos más de 20 años dedicados al criadero de Cane Corso, pero todo comenzó por pura pasión. La primera vez que vi un Cane Corso, su presencia me dejó fascinado. En ese momento, nunca pensé en tener un criadero; mi sueño era tener uno o dos perros, disfrutar de su compañía en casa y quizás, eventualmente, criar un par de camadas. Sin embargo, las cosas fueron tomando forma de manera natural. El amor por la raza, la dedicación y el aprendizaje continuo nos llevaron a fundar lo que hoy es Itacoa, uno de los criaderos más respetados a nivel nacional e internacional.
El Cane Corso es una raza que requiere responsabilidad y compromiso. Su tamaño, fuerza y carácter imponente deben ser manejados con cuidado y respeto. Es por eso que en Itacoa no solo nos dedicamos a la cría, sino también a la educación de los propietarios y al cuidado integral de nuestros perros.
El Nacimiento de X-Man Cane Corso: Un Ejemplar Único
Recuerdo claramente el día que nació X-Man Cane Corso. Desde cachorro, se destacó por su porte, inteligencia y carisma. Era un perro que, incluso a los pocos meses de edad, ya demostraba ser especial. Como criador, uno siempre espera tener un ejemplar que no solo cumpla con los estándares de la raza, sino que los supere. X-Man era ese perro. Cada uno de sus movimientos irradiaba confianza, y su relación con otros perros y personas era digna de admirar.
Una de las anécdotas más significativas que me viene a la mente ocurrió cuando X-Man era aún un cachorro. Estábamos en el proceso de darle biberón, algo que no hacemos habitualmente a menos que sea necesario. En esa camada, teníamos más cachorros que tetas disponibles, y X-Man, aunque fuerte, era generoso. Dejaba que los más débiles comieran primero, algo que rara vez se ve en cachorros. Este gesto fue una de las primeras señales de su carácter noble y protector, que seguiría mostrando a lo largo de su vida.
Un Código Ético en la Cría
El bienestar de nuestros perros siempre ha sido nuestra prioridad. Mi pareja, Belén Hernández, ha jugado un papel fundamental en esto. Como terapeuta cranosacral y floral, Belén utiliza sus conocimientos para asegurar que nuestros perros estén en las mejores condiciones posibles. Ella es quien les brinda ese cuidado adicional que va más allá de lo físico, enfocándose también en su bienestar emocional.
En nuestro criadero, seguimos un código ético estricto. No permitimos que ninguna de nuestras hembras tenga más de tres camadas, y cuando alcanzan esa cantidad, las retiramos de la reproducción. Es entonces cuando pasan a vivir con nosotros, formando parte de nuestra familia como “abuelitas”. Estas perras han dado lo mejor de sí mismas, y se merecen una vida tranquila y cómoda junto a nosotros.
Belén se encarga de asegurarse de que cada uno de los perros retirados esté bien atendido. Sus tratamientos y cuidados les ayudan a mantenerse saludables y felices en su vejez. Cada mañana, cuando salimos al patio, nos aseguramos de que todas las “abuelitas” estén contentas y listas para disfrutar del día.
La Rutina de X-Man y los Secretos del Éxito
X-Man Cane Corso no solo era un campeón en cuanto a presencia física, sino también en el mundo de las exposiciones. La preparación para estos eventos requiere dedicación y constancia. El ritmo constante es clave para que el perro aprenda a mantener la posición junto a su guía. Recuerdo cómo, con X-Man, repetíamos la orden “Stay” una y otra vez hasta que finalmente lo asoció con quedarse quieto. Este proceso puede parecer repetitivo, pero es esencial para un perro de exposición.
Cada día cepillábamos a X-Man, utilizando productos especializados para mantener su pelaje brillante y suave. Los baños también eran parte de su rutina, empleando champús diseñados específicamente para su tipo de piel. Estos detalles pueden parecer superficiales, pero marcan la diferencia cuando se trata de competiciones. Además, lo acostumbrábamos al brillo final, algo que lo hacía destacar en cada evento. Granada fue una de sus exposiciones más memorables, donde todos quedaron impresionados por su presencia.
La Alimentación de un Campeón
La dieta es otro aspecto fundamental en la vida de un Cane Corso. En el criadero Itacoa, hemos optado por una alimentación natural, basada en carne fresca, frutas, verduras, y complementada con yogur natural y aceite de salmón. La carne picada de ternera y pollo es uno de los pilares de la dieta de nuestros perros, pero también variamos con otros ingredientes como plátano, manzana, frutos rojos y calabaza. Todo esto es crucial para que mantengan su musculatura y energía.
X-Man Cane Corso era un amante de la comida natural. Desde que comenzamos con esta dieta hace más de 10 años, notamos una gran diferencia en la salud de nuestros perros. Aunque no desestimamos el valor de un buen pienso, la dieta natural ha sido nuestra elección por sus beneficios visibles en la vitalidad y la calidad de vida de nuestros ejemplares.
Además, la suplementación juega un papel importante, especialmente en perros de razas gigantes como el Cane Corso, que puede llegar a pesar entre 50 y 60 kilos. El cuidado de sus articulaciones es esencial, y siempre trabajamos en conjunto con veterinarios para asegurarnos de que nuestros perros reciban las vitaminas y minerales adecuados para su desarrollo.
El Legado de X-Man Cane Corso
Si pienso en X-Man Cane Corso, aún me emociono. Era más que un perro, era el rey de nuestra casa. Todos los demás perros lo respetaban, y nosotros también. Aunque ya no esté con nosotros, su legado sigue vivo. Muchos de los cachorros que nacen en Itacoa llevan en sus genes la inteligencia, el carácter y la nobleza de X-Man.
Sus descendientes han heredado no solo su físico impresionante, sino también su temperamento equilibrado, su lealtad y su inteligencia. X-Man no solo fue un campeón en las pistas de exposición, sino también en nuestros corazones.
Hoy, cuando veo a sus hijos y nietos correr por los patios del criadero, no puedo evitar sentir orgullo. El X-Man Cane Corso no solo dejó su huella en las competiciones, sino también en la vida de todos aquellos que lo conocieron. Él será siempre recordado como el perro que estableció el estándar de lo que debe ser un auténtico Cane Corso.